3.3.18

Querida Lyds, 2008:

Lyds del 2008. Hola. Te habla tu yo, del 2018. Sí, you've made it! Aunque andabas deprimida y con ideas suicidas porque "oh, qué cruel es la vida" y "oh, el futuro se ve negro", déjame decirte que no podías estar más equivocada.

Primero, el futuro no es negro. En realidad es blanco y un poco sucio. Ahora vives en un país donde el invierno es una gonorrea extremo y la mayoría se ve blanco, por la nieve que ha caído. Sí, te fuiste del país, porque si bien andabas pesimista pensando que nada iba a ser posible, muchas cosas se hicieron realidad... qué digo, las hiciste realidad.

Porque déjame decirte una cosa... aunque no haya sido fácil, aunque haya costado mucho, desde que decidiste dejar de llorar porque sí, las cosas se empezaron a ver diferentes. A veces me hubiese gustado que alguien te lo hubiera dicho, que alguien te hubiera ahorrado esas horas de ansiedad pensando en el futuro, porque no sabías cómo ibas a hacer para entrar a la u, para hacer "algo con tu vida". Pero supongo que eso hacía parte de lo que teníamos que aprender.

Ahora 10 años después no sabría exactamente cómo describirte tantos cambios que te ocurrieron. Si te dijera que te casaste con un hombre estoy segura que te irías de culo... te la pasabas diciendo que jamás imaginabas un futuro con un hombre. 

Bueno, no te pienso aburrir más, ni mucho menos spoilearte la historia. La verdad es muy buena, es tu historia y es la que te ha ayudado a moldearte y a construirte a ser quien siempre has querido ser (incluso en esos momentos en los que te vas a odiar, porque habrán varios). 

Sólo quería decirte que ahora que vamos a cumplir 25 y por fin parece un número grande, algo serio, todo lo que ha pasado hasta este punto tiene sentido, te conduce hasta donde tienes que estar y sí, a veces no a donde quieres, sino a donde debes. Porque así es la vida, porque estás aquí para aprender y creo que no hay otra forma de hacerlo.

En fin, feliz cumpleaños Lyds del 2008. Mi regalo es decirte que todo va a estar bien.