30.3.17

Hace un mes exactamente escribí esto. Todo cambió o al menos un poco.

Todos los días me levanto sintiendo que me puedo deprimir, que es el día perfecto, que allí está la depresión esperándome para abrazarme fuertemente y esta vez no dejarme ir.

Todos los días pasa algo diferente y esa idea se pierde, incluso mientras camino sonámbula en mi cuarto y recupero las ideas sobre lo que debo hacer para empezar el día.

Hay tardes que siento que la vida va por ahí, va fluyendo y de repente quiero llorar. Quiero llorar hasta que se me nuble la vista y la cabeza duela y me la quiera arrancar de tajo.

Todos los días tengo más y más pensamientos y no sé cómo organizarlos. Sé que estoy desesperada, sé que no me conozco en esta situación y quiero salir pronto. Sé que quiero dormir y despertar cuando todo haya terminado.

Y hay otro montón de cosas que no sé, y tengo miedo. Tengo miedo de hacerle daño a los que están ahí, creo que si alguien ha de sufrir debo ser sólo yo.

18.3.17

Les traits de mon visage.

Mi primera experiencia en el mundo bloggeril fue hace 10 años en alguna plataforma española de cuyo nombre no me quiero acordar... la verdad es que no recuerdo, donde entré con algún apodo que también olvidé. Lo que sí recuerdo es mi primera entrada, decía algo así como que no sabía qué era pero que tal vez la palabra bisexual me definía un poco. 10 años después sigo sin saberlo pero sin darle tanta importancia.

Abandoné el blog al momento de abrirlo porque en realidad sólo lo utilizaba para stalkear cuentas de españolas lesbianas que escribían bien. Luego conocí Blogger y abrí mi primer cuenta en el 2009. Desde ahí no he dejado de escribir aquí pero por alguna razón en el 2010 volví a mi anterior blog ese españolete. Ahí había publicado un par de cosas más y uno que otro extraño lo había comentado. Por alguna otra razón también decidí seguir escribiendo allá y de ahí salió un post que nunca olvidaré que tenía por nombre "les traits du visage" porque andaba para esa época aprendiendo francés. Pero nada más lejano a lo que estaba aprendiendo. Escribí ese post porque odiaba mi cara. La odiaba enormemente porque siempre estaba triste. Porque no importaba cuántas horas durmiera y que le hiciera siempre parecía triste, aburrida, ojerosa y no sé qué más. De eso se trataba ese post y escribirlo me dolió mucho y lloré. Se lo compartí a una chica con la que salí por unas semanas y no volví a saber de ella, ni del post ni del blog. Estoy segura que lo eliminé y por tonta no guardé el post. Creo que desde que lo escribí me prometí silenciosamente cambiar esos rasgos, al menos con una sonrisa.

Y lo logré, en el 2011 volví a verme al espejo de una manera diferente y cuando eso pasó lloré frente al espejo (puta, soy muy llorona) porque me vi feliz por primera vez. También escribí sobre eso en este blog y surgió un mini cuento que se llamó Espejo que presenté para cuarto semestre en la universidad y que escribí dos días antes del due date porque obvio... procrastination rules. También lo publiqué aquí y sinceramente lo odio, pero qué se le va a hacer.

El punto de este post es que llevo varios días sin soportarme en el espejo. Otra vez estoy triste y quisiera recordar qué escribí en ese post, a ver si cómo me veía en ese entonces es lo mismo que estoy viendo ahora y que de verdad no soporto. Quisiera recordar cómo describí mi cara y compararla con este ahora.

Lo único que me consuela de todo esto es que en el 2011 surgieron muchísimos cambios que lograron borrar esos rasgos un poco y quiero creer que de eso se trata este momento, de volver a tocar fondo para surgir y volver a cambiar. Volver a verme feliz en el espejo. Y hoy escribo, algo totalmente diferente a ese post pero con la esperanza de cambiar les traits de mon visage.

Let go.

Al inicio me sentí mal, muy mal. La música que se supone alegraría mi noche y las luces que me hipnotizarían estaban cavando mi tumba y la posibilidad de un mal viaje. Tuve que pedir que la quitaran y por alguna razón mi amigo lo que hacía era reproducir la canción nuevamente. Luego escuchamos Hakuna Matata, apagamos las luces y logré relajarme un poco más.

Finalmente estalló y para bien. Empecé a ver todo de colores aunque la única luz que había en ese apartamento vacío era... bueno, no lo sé, sé que algo iluminaba y yo veía todo de colores. Antes de eso había empezado mi viaje de nuevo. Me sentí sobre la torre Eiffel y vi todo París debajo mío. ¿Cómo? No tengo ni idea. Luego traté de volver a "la realidad" y el miedo se hizo tangible, no reconocí mi cuerpo ni el espacio en el que estaba, no reconocía a las personas con quienes estaba y, mierda, no sabía quién era yo. Por más que lo intentara no podía recordar quién era, cómo había llegado ahí, quiénes eran esos y por qué estábamos ahí. Tuve miedo, como nunca jamás lo había sentido, o como tal vez lo siento siempre sólo que está vez fui 100% consciente de él. Por un momento me sentí loca y me pregunté: ¿si no sé quién soy, qué voy a hacer, cómo le digo al mundo, cómo me voy a mover en él? y alguien llegó y me dijo que me soltara, que soltara absolutamente todo lo que creía de mí, me dijo todo lo que era en ese momento: hermana, tía, novia, amiga, estudiante, profesora, mujer, pero lo más importante fue su pregunta: ¿acaso importa? ¿Y qué pasa si dejas de ser todo eso? ¿dejas de identificarte con todo eso y simplemente eres? Suéltate.

Extraño más que nada en el mundo esa sensación después de esas preguntas y lo putamente libre que me sentí al soltar todo. Absolutamente todo. Pero no quiero caer en la costumbre de sentirlo en un viaje con LSD. Sé que podría a llegar a sentirlo sin eso, lo hice cinco meses después. Sé que se puede hacer pero ahora estoy nuevamente tan sucia, tan llena de mierda en la cabeza que me da miedo no lograrlo, no lograrlo pronto. Liberarme un poco y liberar a todos los que tengo en mi cabeza.

Ese fue mi último viaje con L (o algo parecido, ya no recuerdo) en el 2015 y luego hablé un poco de eso acá. Quiero volver a sentirme así, no por tres horas, o tres meses. Lo quiero un poco permanente y creo que me jode la cabeza quererlo tanto.

Necesito empezar a soltar esa presión absurda en la que me metí de querer estar bien rápido. Y aprender nuevamente a abrazar mis miedos y mis inseguridades.

9.3.17

Ideas sueltas sobre el día de la mujer.

Siempre me ha valido madres el día internacional de la mujer. Porque así soy y me vale madres todo. Porque así me criaron y esas fechas no son tan importantes para mí. Así ya no viva con mis papás y la mitad de lo que aprendí con ellos ya no lo sienta, el día de la mujer no ha dejado de ser un día más entre tantos.

Sobretodo porque antes no lo entendía. En el colegio me enseñaron que ese día se conmemoraba la fecha de la muerte de muchas mujeres trabajadoras en una fábrica. Así, tal cual (y ni la fecha coincide, según la internet fue el 25 de marzo de 1911 y fue un poquito después de haberse proclamado el día internacional de la mujer para el 8)
Y claramente en mi cabeza de niña curiosa no cabía la idea de celebrar la muerte de esas mujeres, porque la gente no te sabe explicar, los profes no saben, nadie sabe. Punto. Así que como mujer en formación perdí todo el interés por un día que posiblemente me debería interesar más.

Ahora, siento la necesidad de escribir sobre esto porque ayer no entendí muchas de las cosas que pasaron, empezando por lo básico: ¿qué se celebra el día de la mujer? Tristemente seguimos pensando que se celebra la existencia de esa maravillosa creación de Dios y suena Arjona de fondo y todos vomitamos. NO. Eso no es.
Seguimos pensando que es el día para hacerle entender a la mujer que estamos agradecidos porque ellas existen y por eso debemos darles regalos para que se sientan bien con el hecho de ser mujeres. Y hablo un poquito de lejos, como si eso no me tocara a mí para no tomármelo como tan personal.

A veces siento que el día de la mujer es el día para reivindicar los derechos que tienen las mujeres a ser tratadas como un igual, por el simple hecho de ser un humano como el resto. Con o sin tetas, fin. Es mi derecho a ser niña y querer jugar fútbol y que mi papá no me lo niegue porque eso "es deporte para niños" (He ahí una de mis frustraciones gente, no sé jugar porque papá a los 5 años me gritó en un partido diciéndome que NO PODÍA JUGAR, porque las niñas no jugaban eso y luego toma tu balonazo en la cara para que quedara claro. #TrueStory)

A veces no. A veces no siento eso ni quiero gritarle al mundo que me siento orgullosa de ser mujer porque, ¿para qué?, no entiendo el estar orgullosa por algo como eso. A veces me siento orgullosa de ser profesora, a veces no y me critico mucho, porque ser profe puede tener un estándar, algo donde medirse, algo donde saber si estoy haciendo bien mi trabajo o no. A veces me siento orgullosa de mis sueños cumplidos, a veces no porque aún me faltan muchos por cumplir. ¿Pero sentirme orgullosa por ser mujer? Empecemos por la pregunta básica: ¿qué es ser mujer y cómo mido esa vaina, y aún más importante, cómo saber si me puedo sentir orgullosa o no por eso? El punto está en que no, creo que simplemente el 8 de marzo no es el día para sentirse orgullosa por algo tan básico (yet, really complex) como el ser mujer. Creo que si sigo ese juego estaría entrando al juego de los estereotipos y lo que la sociedad manda sobre los roles de género. Y empezamos otro círculo vicioso que nos dice qué deben hacer los hombres y deben hacer las mujeres, qué está bien y qué está mal...

Hay cosas que creo que a veces no lo entendemos porque no lo vemos (o no queremos verlo), porque por ejemplo, como generación llegamos y ya estában. Ya podíamos votar, y planificar, trabajar y estudiar como cualquier otro. Y claro, no tenemos memoria histórica, no queremos recordar que hubo (y aún hay mujeres) a quien se les niegan los derechos más básicos sólo por el par de tetas que llevan, como si eso fuera un obstáculo para ser alguien. Para simplemente ser. Y creo que a cada uno le llega su momento de aprenderlo. Yo lo aprendí leyendo Persépolis. Creo que no me había dado cuenta lo afortunada que soy al siquiera tener el derecho básico de vestirme como quiera y no verme obligada a utilizar velo como a Marji. Y aún así, me hace cuestionarme qué tan bien me ve la sociedad cuando decido llevar mi cabello como se me da la pinche gana y "no delicado y suave como el de una mujercita" o que se le critique a ciertos hombres llevar el cabello largo y bello como "el de una mujer".

El día de la mujer ayer me dejó claro que sí hay mucho aún por lo cual trabajar para la igualdad de género (no diré luchar porque esa palabra no me gusta) y que sólo me queda hacerlo desde lo que soy y con quienes comparto. Que me parece triste que digan cosas como "feliz día a todas las mujeres del mundo y a los hombres que no le ponen ají a la empanada"... es que suena hasta chistoso, pero no se dan cuenta que detrás de eso the joke is on you, guys. ¿Que ahora un hombre no puede comer como se le venga en gana una empanada?, ¿es menos hombre si no pone ají?... momento, ¿y qué carajos es ser hombre?... Y sí, es un chiste pendejo pero me pone a pensar, no sé ustedes...

El "chiste" está en seguir encerrados en esos estereotipos y tal vez no darnos cuenta y hacernos los bobos por no cambiarlo, no para un día como ayer, sino para todos los días. Que si bien la represión ha sido fuertemente marcada hacia la mujer, no nos quedemos callados cuando también se es hacia los hombres y no nos volvamos una más del montón machista que espera que los hombres de su vida cumplan con expectativas que impone la sociedad. Que no critiquemos nuestros cuerpos por un estereotipo de belleza impuesto pero que tampoco le pidamos al hombre no ser sensible y ser más racional en una relación, por ejemplo. (Mensaje para mí misma)

Sé que se me han ido palabras durante el día, llevo escribiendo este post desde las 8:30 y ya casi son las 18h. Pero hasta aquí van las ideas sueltas que creo pertinentes sacar porque no soporto más quedarme callada y necesito este espacio para expresarme. Que me parece ridículo que me digan que no tuve un buen día de la mujer porque no me dieron suficientes chocolates (True Story, again) pero que sé que no dejo de celebrar quien soy y de descubrirme y de reinventarme cada día porque así es la vida y lo hago no como mujer sino como persona y creo que cualquiera debe tener ese derecho, a vivir su vida como bien le venga en gana y ser feliz.

(Si esperaban un post políticamente correcto, este no es el lugar para encontrarlo; no sirvo y no quiero ser esa persona, y no estoy aquí para defender ningún punto de vista, sólo expresar el mío que puede tener un poquito de esto y un poquito de aquello y cada día va cambiando con la persona que soy. Fin.)


3.3.17

¡Feliz cumpleaños a mí!



Amanecer, volver a renacer
y apareció to' lo que Dios te dio Agradecer y después aprender
qué es lo que soy y para dónde voy
Yo de la vida todavía estoy aprendiendo
mejor caminar antes que salir corriendo Es como un viaje Es como un sueño Es la película estoy dirigiendo Los días, las noches, las risas, los sueños,
canciones guardadas, momentos eternos
desde que no existe ya estoy entendiendo lo que no dijiste ya no es más que un verso. Para avanzar, evolucionar
somos almas dormidas intentando despertar Aprender amar esta vida parte de eso
somos diferentes pero parte de un proceso personal al que debemos llegar y algún día internamente encontrar tranquilidad en tu ser cómo podemos hacer si no te lo has preguntado algún día lo vas a hacer.